La capacidad de adaptación (liquidity) destaca como el reto principal del talento, según un 66% de los directivos españoles. Esta se define como la capacidad de adaptarse de forma rápida a una organización, tener un perfil transversal y ser capaz de realizar diversas tareas. La capacidad de aprendizaje continuo (learnability), con un 25%, y la movilidad (mobility), con un 9%, serían menos importantes para el éxito profesional en un futuro cercano. Estos resultados se extraen del estudio “Soft Skills 4 Talent” llevado a cabo por Human Age Institute en 8 países europeos.