La creatividad es la facultad humana de crear. La innovación es creatividad aplicada a la obtención de resultados, sean económicos o sociales. Sin creatividad no hay innovación posible. Y sin innovación, las empresas acaban por desaparecer.
La velocidad es el signo de este siglo. El número de patentes sigue aumentando de forma exponencial. La tecnología evoluciona a mayor y mayor velocidad. Las industrias y mercados se desdibujan. Caen las fronteras entre sectores y categorías. Las organizaciones están obligadas a adaptarse a estos cambios, pero su situación actual, sus inversiones, su propia historia actúa como un lastre y condiciona el cambio. Ahí está el reto de la innovación.
El 96% de los directivos reconoce que la innovación es esencial para la supervivencia de sus negocios, pero solo un 23% reconoce que ha logrado que sea una parte integral de su organización. La innovación, más allá del área de I+D, es la asignatura pendiente de la gestión.
Este área abordará cómo despertar, potenciar y conseguir que aflore la creatividad de las personas de una organización, así como el proceso para convertir ese Talento creativo en innovación efectiva y captura de valor.
Línea estratégica
En 2016, la línea estratégica del área de creatividad e innovación será cómo despertar la creatividad latente en los equipos y cómo atraer, desarrollar y comprometer al Talento creativo en la organizaciones de hoy. La creatividad es una facultad inherente al ser humano. La ausencia de creatividad en las empresas es debida a factores inhibidores de los que ni siquiera la propia empresa es a menudo consciente. Las organizaciones deben erradicar estos inhibidores y después potenciar y retener el Talento.
“Si como humanidad hemos llegado a donde hemos llegado, ha sido entre otras cosas por nuestra capacidad de crear e innovar.”